Los Azulejos de Toronto están a solo un triunfo de escribir una página dorada en su historia. En una noche mágica en el Dodger Stadium, los canadienses se impusieron 6-1 a los Dodgers de Los Ángeles, tomando ventaja de 3-2 en la Serie Mundial 2025.
El héroe inesperado fue el novato Trey Yesavage, quien con temple y talento ofreció una de las actuaciones más memorables en años recientes. El joven derecho lanzó siete entradas de dominio absoluto, permitiendo una sola carrera y ponchando a 12 enemigos, cifra que establece un nuevo récord para un novato en Serie Mundial.
Yesavage combinó una recta que rozó las 98 millas con un slider devastador que desarmó a una alineación angelina incapaz de descifrarlo. Cada lanzamiento suyo fue un mensaje de madurez y control, impropio de un debutante en el mayor escenario del béisbol.
El respaldo ofensivo no tardó en llegar. Vladimir Guerrero Jr. encendió la chispa con un jonrón monumental por el jardín izquierdo en la tercera entrada, y más tarde Daulton Varsho amplió la ventaja con otro batazo de cuatro esquinas que silenció a la fanaticada angelina. Toronto aprovechó cada error rival y mantuvo el pulso firme en los momentos clave.
Los Dodgers, por su parte, lucieron sin respuestas. Su ofensiva, que durante la temporada fue temible, volvió a verse apagada ante el pitcheo canadiense. Solo un imparable de Will Smith evitó la blanqueada.
Con la serie 3-2, los Azulejos regresan al Rogers Centre con la posibilidad de cerrar la historia ante su público. Una victoria más los separa de levantar su primer título desde 1993, cuando Joe Carter inmortalizó un swing que aún vive en la memoria de los aficionados.
Hoy, más de tres décadas después, Toronto vuelve a soñar.