Las autoridades sanitarias han emitido una alerta epidemiológica debido al aumento de casos de tos ferina en varias regiones de México. Hasta la fecha, se han reportado 120 casos confirmados en 21 entidades federativas, destacando Nuevo León con el mayor número de casos, con 24 confirmaciones.

La tos ferina es una infección respiratoria aguda, causada por la bacteria Bordetella pertussis, que afecta principalmente a bebés, niños pequeños y personas no vacunadas. Su transmisión se da principalmente a través del contacto directo con gotitas respiratorias expulsadas al toser o estornudar. El período de incubación de la enfermedad es de siete a diez días, y los síntomas pueden durar hasta ocho semanas. En su fase inicial, se presentan síntomas como congestión nasal, estornudos, fiebre leve y tos suave, que evolucionan a episodios de tos intensa.
Aunque la vacunación es la principal medida preventiva contra la tos ferina, las coberturas de inmunización se vieron afectadas durante la pandemia de COVID-19, lo que podría estar incidiendo en el aumento de casos en la actualidad. Por ello, las autoridades sanitarias hacen un llamado a completar los esquemas de vacunación y reforzar las medidas de vigilancia.
Es fundamental que los centros de salud de todos los niveles intensifiquen la notificación y el seguimiento de casos, especialmente en los niños menores de un año hospitalizados. Además, se recomienda mantener prácticas de higiene como el lavado frecuente de manos y evitar el contacto cercano con personas que presenten síntomas respiratorios.