Por Mario Kato.-
La fiscal de Sinaloa, Sara Bruna Quiñónez Estrada, subió a redes sociales, una fotografía sobre la entrega de cheques a la viuda de un policía de investigación, quien probablemente murió asesinado en cumplimiento del deber.
Desde la principal institución que debe procurar justicia para los sinaloenses, se toma como bandera a una víctima, en un acto que no es más que el cumplimiento de la ley, ya que el pago de los seguros de vida y pensiones por viudez es un derecho que costó más de diez años de luchas a las familias de muchos policías.
En la publicación no se menciona cuanto tiempo tardó la institución en pagarle estos derechos a la viuda en cuestión, lamentablemente suelen tardarse meses en cumplir con dicha obligación; pero claro la idea era vender la imagen de una fiscal sensible, cuando su acto frívolo solo desnuda su actitud miserable.
Por lo menos el área de comunicación tuvo la decencia de difuminar el rostro de la viuda en cuestión, sería el colmo que además de lucrar con su tragedia personal, además vulneraran sus derechos a la propia imagen y la privacidad de datos.
Seguiremos esperando a que la fiscal logre hacer algo bien en su puesto, para que presuma algo con razón de ser, aunque es sabido que solo se preocupa por perseguir políticamente a los adversarios del gobernador, y de encubrir los feminicidios para no “dañar la imagen” del estado.
La fiscal hoy deja claro que además de incompetente, omisa y nepotista, es frívola; y a la sociedad sinaloense aún nos faltan cinco años para seguir padeciéndola.