La cuarta transformación le dio a México su primera mujer presidenta tras 200 años de existencia como país libre y soberano; Claudia Sheinbaum Pardo. Nuestra querida Sinaloa es de las pocas entidades que aún no ha sido gobernada por una mujer en el poder ejecutivo, ni judicial, en el legislativo hemos tenido ya varias presidentas, como actualmente la joven Yeraldine Bonilla Valverde, presidenta de la Mesa Directiva y Teresa Guerra quien dirige la poderosa Junta de Coordinación Política.
Las condiciones están dadas para que el relevo de Rubén Rocha Moya sea una dama, y es un imperativo social, ya que somos repito de los pocos estados sin que haya habido oportunidad para las féminas.
Por el bloque de la Cuarta Transformación sobresalen por lo menos cuatro perfiles con posibilidades reales a mi ver, la principal es la Senadora Imelda Castro Castro, una de las pocas figuras que se ha mantenido consecuente en el discurso de izquierda, tiene trayectoria propia y es conocida en toda la entidad debido a que ha recorrido todo el estado como parte de sus encomiendas cuando fue presidenta del PRD, diputada local y ahora como Senadora por Morena.
La fortaleza de Imelda es que es un perfil natural por su experiencia, trayectoria y cercanía con la presidente Sheinbaum. También es amiga del gobernador, pero no se le considera de su grupo político.
En el caso de las diputadas federales, creo que quien podría colarse a la carrera es Graciela Domínguez Nava, por su cercanía a Rocha, y el respaldo de algunos grupos a los que atendió en su paso por el congreso del estado y la Sepyc.
María Teresa Guerra es quien detenta el poder en el Congreso de Sinaloa, también tiene trayectoria pero su paso por la Secretaría de la Mujer la ha dejado algo golpeada mediáticamente, su también cercanía con el gobernador y con medios de comunicación la vuelven una posible pre candidata.
En lo que respecta a las presidencias municipales, todas las damas que llegaron por el oficialismo son novatas en cargos de elección popular, creo que es difícil que alguna de ella aglutine la fuerza suficiente como para subirse a la lucha interna.
En el espectro de la oposición el PRI ya lanzó abiertamente a la Senadora Paloma Sánchez, mientras que el PAN su figura más visible es la diputada Roxana Rubio; En MC Fernanda Rivera y Ely Montoya son las cartas femeninas más influyentes, pero ese partido parece que está obsesionado con enviar a un varón, la interna por la candidatura incluso parece ya haber empezado en un zipizape infantil por la dirigencia del partido entre Sergio Torres Félix y El Pío Esquer.
En el espectro de la sociedad civil hay figuras interesantes pero sin una plataforma que parezca poder darles la fuerza suficiente para una gubernatura, pero por lo pronto han sabido hacer su tarea dando voz a sus sectores, como el caso de Martha Reyes, presidenta de COPARMEX en Sinaloa.
Aún es temprano para ir viendo quienes lograrán estar en la boleta, pero es tarde para empezar a construir una candidatura al tercer piso, poco a poco veremos con más claridad los movimientos políticos, lo que es un hecho es que mujeres capaces sobran para tomar las riendas de nuestro estado.