España obligará a los colegios a ofrecer frutas y verduras frescas a diario y a reducir el consumo de bebidas azucaradas en las comidas. Esta medida forma parte de un esfuerzo por combatir la obesidad infantil, especialmente en familias con menos recursos.
En un esfuerzo por abordar la creciente preocupación sobre la obesidad infantil, el ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, presentó el informe del estudio ALADINO sobre alimentación, actividad física y desarrollo infantil. El informe revela que un tercio de los niños entre 6 y 9 años en España padecen exceso de peso, con un 15,9 % diagnosticado con obesidad. A pesar de que esta cifra ha disminuido ligeramente desde 2019, persiste una alarmante brecha entre las familias de bajos y altos ingresos.
El informe destaca que los niños de hogares con rentas inferiores a los 18.000 euros anuales tienen más probabilidades de tener sobrepeso, debido al menor acceso a frutas y verduras frescas y al mayor consumo de bebidas azucaradas. En estos hogares, el 46,7 % de los niños padecen exceso de peso, frente al 29,2 % en familias con ingresos superiores a 30.000 euros. Además, el consumo de frutas es solo del 36,4 % en los niños de familias con bajos ingresos, en comparación con el 53,6 % en las familias de mayores recursos.
Como respuesta, el gobierno implementará una normativa que obliga a los colegios a asegurar que los comedores escolares sirvan alimentos saludables, como carnes y pescados de calidad, así como un mayor consumo de legumbres y cereales. También se eliminarán las bebidas azucaradas en las comidas escolares, para fomentar hábitos alimenticios más saludables entre los niños.